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Dinamarca aplica un impuesto sobre el consumo de carne

No es probable que el nuevo impuesto sobre el consumo de carne de vaca se aplique de forma inmediata en Dinamarca pero se debe recordar que este país se convirtió en octubre de 2011 en la primera economía mundial en poner en práctica un impuesto específico similar, en aquel caso, sobre los productos con grasas saturadas.

La conocida como fat tax pretendía reducir el consumo de productos que pueden incrementar el riesgo de obesidad pero -debido a la oposición de diversos sectores políticos y sociales-, fue abolida en enero de 2013. 

Justificación de la nueva propuesta impositiva

“El cambio climático es un problema ético, porque plantean un riesgo significativo para la salud humana, la seguridad alimentaria, la biodiversidad y la naturaleza. Por lo tanto, una amplia mayoría en el Consejo de Ética considera que los daneses debería hacer más para reducir sus impactos climáticos”, indica la introducción del informe aprobado.

Un punto clave a tener en consideración son los productos de consumo, responsables de entre el 19% y el 29% de las emisiones de gases de efecto invernadero; el 10% de las cuales procede del ganado, y en especial del ganado vacuno, indica la documentación aprobada por este comité asesor del Parlamento de Dinamarca.

”La forma de la vida danesa está lejos de ser sostenible respecto al clima, y si queremos estar a la altura de la meta de Acuerdo de París de mantener el aumento de la temperatura global por debajo de 2 ° C, es necesario actuar con rapidez en sectores como la alimentación”, insiste el informe para justificar su propuesta de nuevo impuesto. “Las investigaciones muestran que una pequeña reducción en el consumo de carne de vacuno en países como Dinamarca se podrían reducir las emisiones de gases de efecto invernadero de los alimentos entre un 20% y un 35%”.

Mickey Gjerris, portavoz del Comité de Ética, ha destacado que, según el informe aprobado por este organismo asesor, “es necesaria una medida regulatoria unificada que conciencie a la sociedad sobre el cambio climático y lance un claro mensaje sobre los alimentos que dañan el medioambiente”.

El comité propone que a medio plazo se establezcan impuestos para todos los alimentos cuya producción dañe el clima pero por el momento se centra en las carnes rojas, que en opinión de este informe es “indiscutiblemente el tipo de alimento más destructivo para el planeta”.

Fuente: La Vanguardia

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